La ingesta de Hidratos de Carbono (HC) durante el ejercicio es, probablemente, el pilar clave de lo que entendemos ahora como Nutrición Deportiva. Sobre todo, por que permite no solo mejorar el rendimiento y la recuperación, sino también optimizar los entrenamientos, generar adaptaciones metabólicas adicionales (puedes leer mi reciente artículo sobre el metabolismo aquí) y, por supuesto, modular la respuesta del organismo a dichas sesiones de entrenamiento.
Como digo, es bien conocido el papel de los HC durante el ejercicio físico. Tanto que actualmente están surgiendo nuevas estrategias para optimizar su ingesta y mejorar su tolerancia. Entre ellas (si eres habitual de este blog ya sabes de lo que te hablo), el Entrenamiento del Sistema Digestivo es un método fundamental para adaptar la rutina de l@s atletas, preparar su sistema digestivo y mejorar la tolerancia, digestión, absorción y oxidación de los HC durante el ejercicio.
En este blog he dedicado unas cuantas entradas, incluido el análisis de nuestro último artículo científico publicado el pasado mes de Abril en la revista Nutrients, a analizar desde cero el Entrenamiento del Sistema Digestivo (hemos decidido abreviarlo en las siglas ESD) o Training the Gut en Inglés, centrándome siempre en los beneficios que esta metodología puede aportar a l@s deportistas. Sin embargo, poco he tratado sobre los posibles efectos negativos que dicho entrenamiento, y en concreto la elevada ingesta de HC, puede conllevar. No es que no los haya, ni mucho menos, sino que mas bien los conocemos poco.
Much@s me habéis preguntado sobre, por ejemplo, los efectos metabólicos de dichas ingestas. En ese caso, siempre he respondido que no es, precisamente, el principal foco de preocupación, sino que existen otros riesgos posibles que, aunque normalmente no son concebidos como tal, pueden tener un impacto muy negativo en la salud de l@s deportistas. Pues bien, estos efectos negativos son los relacionados con la tan olvidada y menospreciada Salud Bucal.
En esta entrada quiero acercarte de forma breve la importancia de la Salud Bucal en el rendimiento deportivo y su prevalencia entre l@s atletas, para después analizar un estudio en el que comparan el efecto de distintas bebidas de HC en dicha salud dental. Si te parece bien... ¡Vamos a ello!
Es muy evidente que para que un/una atleta rinda, lo primero debe de tener una salud capaz de seguir las demandas del entrenamiento y la competición. En este sentido, creo que ningún/a de nosotr@s nos planteamos que un/una atleta pueda rendir a su máxima capacidad sino está saludable.
La salud, sin embargo, no depende solo de un factor, sino que se trata de un complejo equilibrio que l@s atletas desafían diariamente. En este conjunto, la salud bucal es fundamental, como parte necesaria del "well being" de l@s deportistas. Existen múltiples patologías asociadas con disfunciones en la salud bucal y otras muchas complicaciones de salud relacionadas con la higiene bucal. Pero es que, además de eso, una pobre salud bucal puede repercutir directamente en la calidad de vida de l@s deportistas. No olvidemos que el acto de comer, en todo su amplio espectro, es una parte muy importante de nuestra calidad de vida. Una dismunida salud bucodental no solo dificulta esta acción, sino que repercute de forma directa en la capacidad del sueño, del descanso, de la recuperación, etc. y tiene una estrecha relación con distintos factores psicosociales tan importantes en la calidad de vida.
Pues bien, la salud bucodental representa un importante reto para l@s deportistas. Para demostrar esto, basta con echar un vistazo a los artículos científicos que analizan la prevalencia de eventos relacionados con enfermedades bucales, tales como inflamaciones, yagas, etc. y dentales, entre las cuales encontramos condiciones periodontonales avanzadas, erosiones, caries, pérdida de sensibilidad, desmineralización, etc. En concreto, estamos hablando de una prevalencia cercana al 55-75% dependiendo de las disciplinas deportivas. Por ejemplo, un 55% de deportistas de resistencia mostraron tener caries, mientras que en deportes de equipo, este porcentaje ascendía hasta el 89%. Así mismo, en deportistas de fuerza y potencia, la prevalencia mostrada fue menor, en torno al 30%.
Estos datos se relacionan, sobre todo, con la elevada ingesta de azúcares simples y con las malas practicas de higiene de l@s atletas. Dentro de la primera causa, encontramos tanto la ingesta de bebidas y alimentos azucarados durante el ejercicio, como el habitual consumo de snacks ricos en azúcares, que generalmente se convierte en una práctica crónica y abusiva. Así mismo, los comunes episodios de reflujo gastroesofágico representan un importante foco de disfunciones bucales. Entre las malas prácticas de higiene debido a la falta de conocimiento existe un inadecuado hábito de limpieza, una escasa frecuencia de lavado bucal, la utilización de productos de poca calidad y, sobre todo, la escasa frecuencia de visita a l@s profesionales de la salud bucal.
Teniendo todo esto en cuenta, y conociendo los efectos negativos de una pobre salud bucal, es evidente que l@s atletas tienen que poner un especial interés en proteger la salud de sus bocas y dientes, adquiriendo estrategias de prevención efectivas y acudiendo a l@s respectivos profesionales una vez se detectan los síntomas de enfermedad.
Conociendo el escenario actual de la Nutrición Deportiva, en el cual la ingesta de HC durante el ejercicio es un pilar central, la salud bucal es una preocupación a vigilar muy de cerca. Por ello, más allá de utilizar estrategias de prevención, es importante conocer el impacto de los distintos productos en nuestr@s deportistas.
La ingesta de productos con un bajo pH está directamente relacionada con el daño de estructuras dentales mineralizadas, a través de una bajada excesiva del pH del Biofilm Dental, así como con la pérdida de la microbiota bucal, que tantas funciones cumple en el organismo. Aunque este efecto es multifactorial, como digo, especialmente el consumo de productos ricos en HC fermentables y con un pH ácido, están relacionados directamente con el impacto negativo en la salud bucodental. Aquí debes de ser consciente de que la mayoría de productos comerciales son, precisamente, ricos en azúcares y contienen un bajo pH. En este sentido, estudios interesantes han analizado los productos comerciales más comunes entre l@s deportistas, registrando valores de pH inferiores incluso a 4. Teniendo en cuenta el riesgo que ello supone para las estructuras dentales, entre otras, es importante barajar la posibilidad de utilizar bebidas o alimentos que minimicen este impacto.
Para continuar en este conocimiento, a continuación quiero analizar un reciente estudio en el que compararon el impacto en el pH del Biofilm Dental de distintas bebidas. ¿Me acompañas?
Las bebidas con HC son parte fundamental del Entrenamiento del Sistema Digestivo (hablo del tema en este blog) y en la ingesta de HC durante el ejercicio físico. Sin embargo, como profesionales, debemos de conocer su impacto en la salud y, teniendo en cuenta que la salud bucal y dental es especialmente importante en la salud general, también debemos de prestar atención al impacto sobre la misma.
Los siguientes datos que quiero presentarte son de un estudio en el que compararon 3 principales bebidas deportivas: 1) Bebida de nueva generación basada en la adición alginato para formar un hidrogel (contenía Maltodextrina y Fructosa); 2) Bebida comercial a base de Maltodextrina y Sacarosa; 3) Bebida comercial a base de Amilopectina.
Más allá de los resultados observados en cuanto a la oxidación de sustratos endógenos, exógenos, etc., quiero centrarme únicamente en el efecto de dichas bebidas en el pH del Biofilm Dental. Para analizar esto, se utilizaron a 6 sujetos a los que se les midió el pH en una situación de reposo, tras la ingesta de dicha bebida.
Los resultados fueron los siguientes: 2, 5 y10 minutos más tarde de la ingesta de la bebida, el pH de los participantes bajo considerablemente en las 3 bebidas, sin embargo, esta disminución fue mucho más pronunciada (p<0.005) en la bebida a base de amilopectina (AP) y en la bebida a base de Maltodextrina y Sacarosa (MD+SUC), respecto a la bebida de Hidrogel. Así mismo, tras 10-15 minutos, la recuperación del pH fue gradual hasta un pH más bajo del inicial, sin mostrar diferencias significativas durante este periodo.
Estos datos ofrecen nuevas líneas de conocimiento que relacionan la encapsulación de HC con un menor impacto en el pH dental, ofreciendo una más rápida recuperación del mismo y un menor riesgo de eventos como las caries o la erosión. Además, tal y como los propios autores concluyen, la adición de acidulantes en las bebidas deportivas podría representar un punto adicional de dicho impacto en el pH del Biofilm Dental.
En definitiva, la salud bucal de l@s deportistas es un punto a tener muy en cuenta por parte de l@s profesionales de las ciencias del deporte. La elevada ingesta de HC puede conllevar efectos negativos en el equilibrio bucal y dental. Las bebidas deportivas ricas en acidulantes parecen tener un impacto más negativo en dicha salud bucodental que una bebida que no los tiene. Además, el hecho de encapsular los HC mediante hidrogeles con alginato parece disminuir el impacto negativo asociado a su ingesta.
Antes de sacar conclusiones debes de ser muy consciente de que se trata de un único estudio en el que la baja muestra puede no representar una adecuada potencia estadística, además de tener importantes intereses de financiación detrás. No obstante, es un paso importante en el conocimiento de los efectos de la elevada ingesta de HC. Antes de empezar a enfocarte en la bebida que consumen tus deportistas, creo que debes comenzar por establecer protocolos de higiene bucodental apropiados. Si quieres aprender más sobre este tema, desgrano toda esta información en el Curso Entrenamiento del Sistema Digestivo.
Espero que esta entrada te haya servido para ser consciente de la importancia de la salud bucal en el rendimiento deportivo y del impacto de las bebidas deportivas en la misma. Si así ha sido, te animo a que lo compartas o me escribas tus comentarios en la sección de debajo.
¡Una vez más, muchas gracias por estar ahí!
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